Alternativas superiores a: MP3

Alternativas superiores a: MP3

Escrito por: Francisco Villalobos   @belhor    6 diciembre 2011    2 minutos

El MP3 es el formato de compresión de audio más utilizado, pero estas alternativas son una excelente opción para obtener una mayor calidad de sonido.

En esta ocasión más que hablaros sobre alternativas a las aplicaciones más comunes, me enfocaré en presentar formatos alternativos al formato de compresión de audio más utilizado, el MP3. Desde hace bastantes años el MP3 ha reinado como el favorito de muchos y a pesar del gran número de competidores que han querido su trono ninguno ha podido derrocarlo.

Al día de hoy el MP3 parece que ha perdido un poco de auge; de continuar así, pronto podríamos estar hablando de un nuevo formato revolucionario. Mientras tanto hablaremos sobre las 3 principales alternativas al MP3.

Advanced Audio Coding (AAC)

Mucho se ha hablado sobre la adopción de AAC, pues supuestamente éste ha sido diseñado para ser el sucesor del MP3; de hecho, después de que Apple lo adoptara como el formato estándar para sus dispositivos ha ido ganando más y más adeptos. Así pues, AAC destaca por ofrecer una calidad de sonido superior sin producir tanto impacto en el tamaño de los archivos, además las posibilidades ofrecidas por este formato son superiores a las del MP3.

Ogg Vorbis

Ogg nació como una respuesta (libre) a muchos de los formatos propietarios. Al igual que AAC, Ogg otorga una mayor calidad en sus archivos, sin embargo, tiene la particularidad de ser preferentemente de bitrate variable que fijo; es decir, aunque se especifique una tasa de muestreo lineal se tenderá a utilizar un bitrate más alto cuando sea necesario.

Free Lossless Audio Codec (FLAC)

El incremento en las velocidades de descarga así como el aumento en las capacidades de almacenamiento hacen de FLAC una alternativa bastante interesante, este formato a diferencia de los anteriores es un tipo de compresión de audio sin pérdida, esto nos garantiza que la calidad del sonido será la mejor y que por ende podremos disfrutar del sonido como ha sido concebido. Hasta ahora el gran problema de este formato es que pocos reproductores personales lo soportan, además los archivos generados suelen ser muy pesados.

Aunque he decidido no ahondar en cada uno de los formatos presentados, a grandes rasgos estas son las posibles alternativas a tomar en cuenta. En lo personal y como se puede leer en varios sitios especializados, lo más idóneo es comprimir nuestra música en AAC u Ogg. Seguramente la mayoría de vosotros opté por AAC, ya que este formato tiene mucho más soporte que Ogg (fuera del ordenador). Por otro lado, si se consideran melómanos o disponen de un equipo de sonido High End lo mejor será utilizar algo como FLAC o algún otro formato lossless.

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