En Japón desconectarán de la red a los ordenadores con Windows XP
Una solución poco menos que curiosa es la que llevarán adelante algunos gobiernos locales japoneses y oficinas públicas, ante la imposibilidad de migrar todos sus equipos con Windows XP a Windows 7 o a Windows 8. La solución consiste en desconectar de la red aquellos equipos que no sean migrados, para evitar la entrada de software malicioso y que se transmita a otros equipos.
La mayoría de los equipos que actualmente ejecutan Windows XP serán migrados o reemplazados por nuevos equipos y nuevos sistemas operativos, pero cada municipio conservará algunos de esos ordenadores para diversas tareas que no necesitan el estar conectados a Internet. En todos estos casos especiales, las tarjetas de red serán quitadas; algunos incluso contemplan cerrar los puertos USB (¿de qué manera?) de estos equipos sobrevivientes.
La razón de todo esto es que el gobierno no cuenta con los recursos para reemplazar o mejorar todos los equipos de su administración, la mayoría de ellos corren sobre Windows XP. Se hace difícil imaginar hoy en día que un equipo no se conecte a una red (y menos aún en una oficina pública), pero tal vez estos equipos puedan servir para hacer tareas muy específicas y repetitivas, como imprimir o como albergue para grandes cantidades de archivos que deben guardarse en algún sitio.
Existe una alternativa, la de Linux. Claro que esta alternativa tiene sus matices. De acuerdo a algunos funcionarios japoneses, habría que adaptar ciertos programas en uso en las administraciones de aquel país para que se ejecuten con Linux, algo que aún no ha ocurrido ni ocurrirá, aún si fuera posible. Y todo por una razón: las restricciones de los contratos a largo plazo hechos con Microsoft.
Vía | The Register