Uno de los usos más extendidos de las memorias USB es su uso para instalar sistemas operativos completos. Como ya os hemos mostrado, Windows 7 se instala fácilmente desde USB, así como muchas variantes de Linux, algo que no era posible algunos años atrás cuando dependíamos exclusivamente de los DVD o CD.
En los inicios del uso de los ordenadores para casi cada cosa de nuestra vida cotidiana, era bastante normal que los diskettes de 3.5 resultaran dañados al poco tiempo de uso, perdiéndose los datos que habían en él. Con la llegada de las memorias USB la situación ha cambiado para mejor; los datos estarán un poco más seguros, pero un virus o un borrado accidental pueden hacernos perder importantes documentos, fotos, música o simplemente programas almacenados.